dissabte, de gener 26, 2008

MONO DE NATIONAL

Gandia se está convirtiendo en un verdadero pozo negro de la distribución. En Futur@ no se renuevan las novedades de superhéroes desde noviembre y a Olivares cada vez llegan menos. No es que quiera comprarlos todos, de ninguna manera, pero como mínimo me gustaría ver alguna de esas novedades que aparecen en los famosos listados de novedades.

De todas formas, la escasez de grapas superheroicas no me molesta. Sí lo hace, y mucho, el que National Geographic se haya olvidado de dónde vivimos. No nos han llegado los números de septiembre, noviembre, diciembre ni enero. El de octubre creo que llegó de milagro.

Los números de NGSM de cada mes siempre han llegado en los últimos días del mes anterior. Si se ha retrasado alguna vez, es tan anecdótico que ni lo recuerdo. El caso es que jamás había fallado en diez años. El de septiembre no llegó en agosto y, cuando pasaron las suficientes semanas como para asegurarnos de que ya no iba a llegar, en la editorial se apuntaron nuestra reclamación.

El de octubre sí llegó, para despistarnos y hacernos creer que todo funcionaba como de costumbre, pero el de noviembre, que adjuntaba un especial para su distribución en quioscos, no. El «trato especial» que recibimos los suscriptores es que tenemos que preocuparnos y acordarnos de pedir el número extra aparte. Gratis, eso sí.

Les he llamado más o menos cada dos semanas desde hace cinco meses y los números están más que repedidos. Sin embargo, la respuesta es siempre la misma: todavía no han salido. No entiendo cómo ni siquiera el número de septiembre está en camino. Parece que cambiaron de distribuidora, que la vieja distribuidora no le explicó a la nueva dónde tiene que entregar las revistas, y que la orden de reenviar los números no ha llegado al almacén. Todo junto resulta en una gestión lamentable. Solución: la suscripción caducaba este mes y no la hemos renovado. El ejemplar de febrero ya está en los quioscos y es el primero que sostengo en meses. Lo admito: soy un yonki de la National.

El lunes me contaron que la distribución del número de enero, junto con el especial de noviembre, se había retrasado y no había empezado hasta la semana pasada. Otra cosa es que me lo crea, porque el de febrero ya está disponible. Por ahora, hemos dejado de depender de que nos la traigan a casa y podremos volver a leer la revista con regularidad.

Claro que tendré que volver a llamar para que me confirmen si nos han cancelado o no de verdad, porque me pareció demasiado fácil. Y para seguir insistiendo, que cinco números es mucha lectura pendiente.