diumenge, de desembre 02, 2007

EL (OTRO) CUARTETO DE NUEVA YORK

No sé si nadie más que yo ve esa relación entre El Mago de Oz (1900) y Los Cuatro Fantásticos (1961), pero lo que es seguro es que no estoy solo en la siguiente acrobacia.

Tras la reinterpretación de los personajes de Baum llevada a cabo por Kirby y Lee, es ésta la que proyecta su sombra sobre las ficciones posteriores de cuatro personajes. En ningún momento se trata de copias exactas ni imitaciones: tan sólo se incorporan a los nuevos personajes algunas de las características señaladas en el post anterior, y que parecen funcionar muy bien combinadas en esos conjuntos de cuatro.

La última versión más conseguida de la estructura, tal vez la mejor gracias a las personalidades de sus protagonistas, la hallamos en la serie Seinfeld (NBC, 1989-1998).

Sí, a mí también me encanta este dibujo. Apareció publicado en el correo del número 31 de Biblioteca Marvel: Los 4 Fantásticos (Forum, julio 2001) y cuando lo vi, tiempo después, pensé que no estaba solo en mis rayadas mentales y que efectivamente había una relación entre los Cuatro Fantásticos y los protagonistas de Seinfeld, conexión que es incluso mayor, por más literal, que la de los primeros con los cuatro de Oz.

Hace mucho que no he visto la serie, pero creo que recuerdo lo básico para establecer las comparaciones. Ya puedo recordarlo, puesto que es una de mis sitcoms preferidas, si no la que más. Junto con Frasier y Friends, ambas también de la NBC, conforma la tríada por excelencia de los noventa. Por cierto, que desde que finalizaron éstas en 2004 han surgido muchísimas series dramáticas, pero no me suena que esté pegando fuerte ninguna nueva sitcom. Hace poco empecé con Curb Your Enthusiasm (yo traduzco el título como "Mengua tu entusiasmo"), que es del 2000 y todavía aguanta, pero o yo estoy muy desinformado o esta década no está dando ninguna sitcom a la altura de Seinfeld, Frasier y Friends. Si sobrevivimos a nuestro presente, ésta será llamada "la década triste" (o del terror, o del miedo).

Sigamos. Los protagonistas de Seinfeld son cuatro (Jerry Seinfeld, Elaine Marie Benes, George Louis Costanza y Cosmo Kramer), como los 4F (Reed Richards, Susan Storm, Benjamin Jacob Grimm y Johnny Storm). Son tres hombres y una mujer, como los 4F. Viven en Nueva York, como los 4F. Jerry es judío, como lo eran los padres de Kirby y Lee, creadores de los 4F. Jerry es el líder del grupo, igual que lo es Reed, de los 4F. Jerry y Elaine fueron pareja igual que lo son Reed y Susan, de los 4F. Jerry y George son amigos desde su época de estudiantes, igual que Reed y Ben, de los 4F. Kramer es el más fogoso de los cuatro («¡La kavorca, Jerry! ¡Tengo la kavorca!»), igual que lo es Johnny, de los 4F. George es el más corpulento de los cuatro, igual que lo es Ben, de los 4F. Hasta se podría decir que la serie tiene su Hombre Topo particular (porque el Doctor Muerte no puede ser) en Newman, la archinémesis de Jerry.

Y poco más. Si no conocéis Seinfeld os la recomiendo desde aquí. Seinfeld es lo más parecido a LA VIDA que he encontrado en la ficción desde Ulysses de Joyce.

Aparte de en El Mago de Oz, Fantastic Four y Seinfeld, el esquema de cuatro se repite (además de en Gominolas) en un par de sitios más -y con esto daré por acabada esta parte. El más antiguo de los ejemplos que quedan es Star Wars (1977), en cuyas escenas en el interior del Halcón Milenario no es difícil atisbar ecos de los 4F en los personajes de Han Solo, Chewbacca, Leia y Luke Skywalker. A saber: Solo y Chewbacca son amigos y pilotos (como Reed y Ben); Leia y Luke son hermanos (como Sue y Johnny); Solo y Leia se lían (como Reed y Sue). Además, por supuesto, está el mismo Doctor Muerte copiado tal cual en Darth Vader.

Por fin, el ejemplo más controvertido de todos: The A-Team (NBC, 1983-1987). Pues sí, también el Equipo-A son cuatro, son veteranos de guerra (del Vietnam; Reed y Ben lo eran de la 2GM), tienen un líder que fuma (Hannibal Smith; Reed fuma en pipa en los primeros números de Fantastic Four), un fortachón con diferente color de piel (si B.A. Baracus es negro, Ben es naranja), un ligoncete (Faceman) y... bueno, no tienen una mujer pero tienen a un loco (Mad Murdock). Si Faceman se hubiera llamado como lo conocemos en España, Phoenix, la jugada me habría salido redonda, pues podría hablar de un ligón que es un ave de fuego, como la Antorcha Humana de los 4F. De nuevo, como ocurrió con Sue Tornado (Susan Storm versión Vértice), es como si los traductores hubieran intuido algunas de estas relaciones.

The Wonderful Wizard of Oz (Lyman Frank Baum, 1900), The Fantastic Four (Jack Kirby & Stan Lee, 1961), Star Wars IV: A New Hope (George Lucas, 1977), The A-Team (Stephen J. Cannell & Frank Lupo, 1983) y Seinfeld (Jerry Seinfeld & Larry David, 1989). Todas son ficciones de cuatro personajes, cada uno de ellos con características poco intercambiables y unas relaciones bastante definidas, como si se debieran a un orden superior, a una superestructura: el esquema de cuatro.

Gominolas es sin duda la peor manifestación que ha dado este esquema. Sobre ella escribiré en la siguiente entrada. Mañana no creo, seguramente al otro.