dimecres, de maig 03, 2006

RECUERDOS (3) / POST DE RELLENO

Primaveras de 1989 y 1990, años de comuniones de mis amigos de colegio (también la mía en el primer año) y de Marc y Pedro. La frase de mi madre por entonces: “Vigila lo que comes no sea que piensen que en casa pasas hambre”.

En el 93 fueron las de mi hermano y Pablo. Dejando aparte el aspecto religioso (que por supuesto era ya inexistente por entonces; ¿a qué imbécil se le puede pasar por la cabeza que un niño de 8 años entienda la Fe?), fueron buenos momentos.

A todo esto, creo que pronto hará 10 años (si no éste, el que viene) que no voy a ninguna comunión. La de Eloi fue mi última, creo. Y que dure.