divendres, d’abril 06, 2007

VEINTE MINUTOS EN FUTUR@

A última hora de la tarde de ayer me pasé por lo más parecido a una tienda de cómics que tiene Gandia. Por nada en particular: por echar un vistazo, guarecerme de la llovizna vespertina (habitual de estos días), comprobar si ya habían traído algunas novedades de abril, ver relucientes tebeos de colorines. Así, mirando la estantería, cogiendo ejemplares, hojeándolos y devolviéndolos a su lugar (y dejarlos, todo sea dicho, más ordenados de lo que estaban), ocupé un agradable cuarto de hora largo. Y no compré nada.

Me venía a la cabeza una frase que Bart Simpson pronuncia en el número #1 de Bartman (aparecido en EEUU en diciembre de 1993 y por aquí, así de memoria, en el verano de 1996; cosas de la magnífica labor de Ediciones B, que jamás fechaba los tebeos de los Simpson ni que le fuera la vida en ello): «¿Hay algo que inspire más adoración en la verde tierra de Dios que una estantería atiborrada de tebeos en el punto álgido del verano?». Si lo hay, al menos, no está a mi alcance. (Me ha costado un rato localizar la frase de marras).

Novedades del mes, pocas. Lo más atractivo, a pesar de su reducido tamaño, El informe 11-S, editado por Panini (y no, no os he puesto el enlace oficial porque el sitio de Panini Cómics es de lo peorcito que uno puede encontrar; de nada). Como el estilo de la narración es totalmente estadounidense (esto es, de cómic de superhéroes, mainstream, pijamero o como queráis llamarlo), esperaba la obra en formato comic-book, pero según he podido comprobar en Amazon, parece ser que ese tamaño que me resulta un poco pequeño, casi de bolsillo, es el mismo que el original, así que nada que reprochar (a no ser que me haya confundido convirtiendo pulgadas en centímetros). Es un tebeo (y no "novela gráfica", como reza la portada; escupo y escupiré mil veces sobre ese calificativo) que supongo que caerá algún día, más pronto que tarde, a pesar del precio (cinco euros menos sería perfecto). Y por supuesto me tira mucho más que leerme la traducción española del informe, que cuesta 18 (dos menos) y sale por tanto más cara. El cálculo es sencillo: al mismo precio, y sin que tenga por qué tratarse de la misma obra, un tebeo resulta más barato porque ofrece texto e imagen, el trabajo del guionista sumado al del dibujante. Por ejemplo, la edición de Planeta de V de Vendetta, a 18 euros, no sólo es más barata que un libro que cueste lo mismo, sino (esta vez en una comparación "a peso" y "por tamaño", además del precio, claro) que también lo es respecto de El informe 11-S. Por tanto, en el caso de que tenga 20 euros en la mano que pueda dedicar a comprar un solo tebeo (este detalle es importante), los gastaré en otros títulos que me compensen (subjetivamente) más, esto es: completar la colección de Will Eisner, hacerme con otras obras de Joe Sacco, o con los tebeos que Jack Kirby realizó en DC, u otro volumen de Rip Kirby (y tal vez alguna cosilla más, pero estos son los básicos).

Novedades del mes, pocas, pero porque la tienda tiene una relación rara con el distribuidor (o tal vez no la tenga). A punto he estado de caer con el especial Illuminati de Los Nuevos Vengadores, preludio de la Civil War, pero... ¡2.50! ¡Con menos del doble me hago con un número de El cuarto mundo de Jack Kirby, que no sólo seguro que es mejor sino que me cundiría más! Lástima que de ésta sólo tuvieran los números #5 y #6; de haber estado el #1 habría sido más de lo que hubiera podido resistir. Si tiene que caer la Civil War, que sea sin preludios ni chantajes completistas.

Ni rastro del Daredevil de Brubaker, ni de Green Lantern, ni de Sandman, ni de La cosa del pantano. Lo que me lleva a pensar que no sólo hay que hablar de los tebeos cuando salen, sino también cuando no salen, que es la mayor parte del tiempo. Mirando los tebeos que no iba a comprar, he descubierto que en Marvel Team-Up Spiderman llevan unos meses publicando una historia de los cómics Marvel que me puede resultar útil para el proyecto. Pero como esta semana se ha anunciado (también por parte de Panini) el inicio de la publicación de los doce tomos de Una historia de los cómics, y como el que hará el número 4 será todo para Marvel, servidor se huele que el contenido no puede variar mucho y estará más ampliado (espero).

Sobre el proyecto hablaré la semana que viene. Hoy habéis descubierto que ser lector de tebeos ha hecho de mí un pesetero. Y es que cuando la diferencia entre tener dos euros y no tenerlos, afecta a tener un tebeo, o no tenerlo... la curva del confort y de la frivolidad occidental se encuentra en un lugar tan alto que sólo puede descender.