dimarts, de desembre 20, 2005

Todo igual

Dios, no recordaba que Gandia fuera tan fea.
Lo peor es que con la cama cubierta de regalos y trastos, con la mesa oculta por papeles que serán mis lecturas de navidades, ¿dónde duermo yo?

PD: no, lo peor es que delante de casa han hecho unas obras largo tiempo esperadas, y las han hecho como sólo los ayuntamientos de Gandia y Benirredrà saben hacer las cosas. Mal.

PPD: ¿se nota mucho que no quería venir?